18 de octubre de 2007

HOLA DE NUEVO¡

Hola de nuevo:

Vuelvo para escribir un rato mas. Le he cambiado el nombre al blog para ver si así es mas llamativo que el anterior. De http://allwahtyouareiswahtyouthinkaboutyou.blogspot.com cambio a http://urgecambiar.blogspot.com/.
En esta ocasión, hablaremos un poco de las sensaciones que tenemos todos al enfrentar un cambio de forma de ver las cosas. Las cosas exteriores son un sinfín de creencias y maneras de expresarse o diferentes mascaras que optamos por ponernos ante todos. Las cosas interiores conllevan un concepto mas profundo e incomodo en cuestión de saberlas entender. Cuantas veces nos sentimos no satisfechos por ejemplo al regresar de una reunión o de algún centro de diversiones al que fuimos por que las presiones sociales (en las cuales por lo general nos desarrollamos totalmente, sin darle importancia a nuestro verdadero gusto) que nos lo impusieron? Este ejemplo un poco vago, podría ser, solo para poder ejemplificar que esa no satisfacción que sentimos es debido a que en la mayoría de las personas y de los casos, estamos haciendo algo no por que nos nazca, sino por que hemos elegido presentarnos fuera de nosotros de esa manera ante todos. A que voy, que desde que somos niños, somos “educados” (yo diría domesticados) a seguir ciertos comportamientos sociales, religiosos, morales, los cuales en muchas ocasiones, solo seguimos porque así fueron implantados en nuestra mente y nunca nos hemos detenido a analizarlos, ya sea por que no lo queremos hacer debido a que estamos en una zona de supuesto confort o debido a que el pensar diferente, durante toda la historia de la humanidad ha sido visto como sinónimo de loco, inadaptado, inmaduro, etc. Relacionando esto que escribo con todo lo abajo escrito, esta la necesidad de un cambio radical en la manera de ver social, religiosa, moralmente y todos los conceptos que queramos poner, a nuestro prójimos, a nosotros mismos, para hacer realmente de este mundo un mundo mas llevadero mas armónico y mas amoroso. Algunos pensaran que cursi o que utópico o hasta que ridículo, pero el pensar de esa manera es la que ha causado tantas cosas y tantas situaciones difíciles en este planeta que poco a poco estamos llevando a su destrucción. Y no me refiero a la inmensa mole de piedra que es el planeta en si, sino a que los seres humanos podríamos desaparecer debido a esa negatividad o a esa desidia o pena en el cambiar. Porque miedo a cambiar o pena a cambiar? Imagínate cuanta gente creería perder todo lo que ha logrado, poder, dinero, posición, simplemente porque algún loco le dice que hay que cambiar las formas de ver y comportarse en esta nueva era que se avecina. Y realmente no me refiero a solo ese tipo de poder o materialismo, sino a muchas otras maneras de comportarse como son egoísmo, odio, desamor, infidelidad, que son acciones negativas que en nada ayudan a nadie, ni al mismo ser que las presume o pretende hacer creer que son la base de su poder. Este tipo de poder, cae a su propio tiempo. Pero es importante saber que hay una esperanza de cambio. Muchos “locos” (manera en que se ven a nosotros en este tiempo) como yo poco a poco nos vamos uniendo y haciendo mas y por ende el panorama deberá de empezar a cambiar por el bien de todos. Es mas poderoso un sentimiento positivo que uno negativo. Así que, no es una lucha sencilla, pero tenemos la confianza que en lo mas profundo de todos los seres humanos hay una lucecita de esperanza que en poco tiempo empezara a brillar mas intensamente. Las guerras se acabaran cuando todos los seres humanos nos internemos en nosotros mismos y encontremos esa paz interior. No importando si eres gordo, flaco, guapo, feo, hindú, mexicano, americano, hablas ingles, ruso, mandarin, todos en el fondo somos seres humanos y por esencia todos buscamos paz y amor dentro de nosotros mismos. Todos podemos lograrlo, es solo que cada uno de nosotros y por si mismo, se encuentre allá dentro de si para amarse y quererse y así poder derramar esos sentimientos con quienes le rodean.
Que mi Dios o su Dios los ilumine y bendiga, y los colme de fuerza para esta lucha tan peculiar.

Saludos

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