4 de noviembre de 2011

Desesperacion??

Hola amigos, les deseo un buen inicio de fin de año, ya que nos a empezamos a adentrar en Noviembre 2011, un mes en combinación con un año que nos dejara ver, si es que lo creemos, sentimos y aceptamos, la posibilidad de un nuevo amanecer y de una nueva perspectiva de vida. El tan mentado 11.11.11. Antes de que nos adentremos en estos números, analicemos muchas situaciones que están pasando en estos días y que solo acertamos en quejarnos por el panorama que nos asecha. En estos momentos solo vemos que hace la gente mal ubicada, de bajo perfil de energía armoniosa. Este cambio que se avecina, es un cambio que inicia en nosotros mismos. La vida es una sucesión de causas y efectos y que muchos de los efectos que hemos estado viviendo a nivel social e individual, no es más que el resultado de las causas que originamos. Hablamos de una sociedad agresiva y desviada y nunca nos hemos puesto a ver realimente en que puse mi granito de arena para que esto se creara. Si realmente nos queremos adentrar en que esto cambie, debemos adentrarnos en nosotros mismos y analizar de manera sincera (no nos podemos engañar a nosotros mismos) con cuantos granitos de arena he participado. Me dirás yo no lo he hecho y créeme que dudo que no hayas participado. Pongámonos a pensar cuantas veces le he gritado a mi pareja o a mis hijos, al vecino o a la pesera que se me cierra, con que tanta frecuencia me he querido enriquecer a costa de gente o de tratar de pagar menos impuestos, peor aún evadirlos. Cuantas veces ya teniendo dinero para vivir varias vidas cómodamente, mi avaricia me pide hacer mas sin compartir con nadie, cuantas veces he pisado la línea de peatones con mi auto no importándome la gente, gritarle al agente de tránsito por qué me creo superior o con "palancas", cuantas veces en mi creencia de que soy mejor que alguien lo he humillado con palabras como “naco”, “indio”, “gay” y muchas más palabras. Es momento de analizar mis actuaciones para ver mis consecuencias. Hemos hecho entre todos lo que estamos viviendo. Muchas veces comentamos que nuestra vida ha sido de bien, pero no ponemos atención a los pequeños grandes detalles, los cuales queremos tapar y no darles su importancia. En un mundo energético, todos estamos conectados en una gran red hipercompleja de energía, que en su tiempo llamo la LATTICE el científico mexicano Jacobo Grinberg-Zylberbaum. Esta interconexión nos hace ser directamente participes con nuestras acciones al desarrollo de la realidad de todos a nivel humanidad. Cuando yo me enojo, me conecto al canal del enojo de esta matriz, y con todos los enojos de la humanidad hace que se acreciente en mi esta vibra multiplicándola y haciendo que nos salgamos de control y hagamos cosas que nuca creímos hacer. Simplemente toda esa mala vibra aterrizo en mi y exploto. Del mismo modo, porque funcionan esas milagrosas cadenas de oración, de meditación, de alegría, de amor, simplemente porque en esos momentos nos conectamos a la buena vibra, al lado iluminado de nuestros seres y en conexión con el Supremo. Todos dentro de nosotros mismos somos esencia de un ser supremo que nos quiere felices y disfrutando de nuestros momentos de alegría y tristeza, que aprendamos a que esa esencia Divina crezca y comparta con todos los seres de mi alrededor. El gran libre albedrio, no es más que trabajar en nosotros mismos y en base a nuestras experiencias tomar las mejores decisiones, pero no enfocadas en lo material sino en lo espiritual, que es lo que realmente nos va a llenar de felicidad y de unión con el Supremo. En esta fecha, 11.11.11, se abrirán portales energéticos, que no se ven pero si se sienten, y que la gente materialista seguirá viviendo en el mundo del amor al poder, políticas injustas, la razón, y seguirán viendo las cosas como hasta ahora. Por otro lado habremos gente que queremos vivir en un mundo de paz, de convivencia, de aceptar que todos somos perfectos tal cual somos, y que en unidad nos iremos conectando al Supremo sin miedos ni tabúes, y podremos comenzar una nueva forma de vida, la del poder del amor. Este es el verdadero libre albedrio. Atrévete a bajarte de tu materialista manera de ver la vida y abre tu corazón a la locura del amor. Solo en nosotros esta el cambio a lo que siempre hemos querido, la paz y el amor. Deja de ver diferencias entre pobre y rico, negro o amarillo, gay o hetero. Aprendamos a vivir con tolerancia y amor verdadero al prójimo. “Amaras a tu prójimo como a ti mismo” Jesús de Nazareth.
Con amor. Namasté.